lunes, 26 de marzo de 2018

Almas gemelas que se encontraron gracias a una equivocación

Adellabrac.es nos propone un reto que consiste en escribir, cada mes, un relato de 5 líneas (aprox. 434 caracteres, incluyendo espacios) que contenga las tres palabras propuestas.

Las palabras de este mes de marzo son: leve, señora y árboles




Ella lo sigue por medio de la leve huella que deja su abrigo al recoger el polvo del camino. Él la percibe, cree saber quién es la señora, por lo que  se dirige hacia el bosque,  y entre los árboles del final del camino, le entregará lo que está buscando.

Llegan al punto, se vuelve para recibirla y frente a frente se dan cuenta que no son quienes creían, sin embargo, después de ese primer contacto, ya nada los detuvo.





También te puede interesar: 



viernes, 16 de marzo de 2018

El anhelo de un vendedor de discos

Cada día, siempre en el mismo rincón donde improvisa su tienda de discos, el vendedor regala alegría, sueños, ilusión y sonrisas con su música. Al anochecer, cuando la última función de cine concluye y el parque de entretenimiento cierra, sin bullicio y algarabía, su mundo queda desierto. Cuenta muy pocas monedas ganadas, recoge su mercancía y en silencio, inicia el camino de regreso a casa. 

En cada paso de lento transitar, arrastra la sombra alargada de un dolor permanente que también invade su alma, dos lágrimas heladas brillan en sus ojos, en seguida se deslizan sobre un rostro curtido lleno de pliegues, piensa que el calor que consigue arrancarle a la vida, no es suficiente para que su ser retenga esa calidez. Echa de menos el olor a tierra mojada, tras la lluvia de verano en la granja junto a su Elena, cuánto anhela quedar atrapado en ese tiempo. 

Aferrado al producto que le quedó sin vender, solo y cansado de este ciclo de vida del que no logra sentirse pleno, mientras Castelló cavila al andar, presiente que esta noche es especial,  desea fervientemente emprender ese viaje, entonces, comienza a murmurar entre dientes el conjuro impronunciable que le regaló una mujer que sabía de su infortunio y quería ayudarlo, tenía apariencia de bruja y se hacía acompañar de un gato que lo miraba fijo. 

De inmediato se siente dentro de un sueño, es un felino que corre sobre los tejados de una ciudad dormida, para luego de un salto, mezclarse con la oscuridad.

Al llegar a su destino, se da cuenta que esta vez sí sucedió…

El texto anterior participa del ejercicio de escritura “Móntame una escena” correspondiente al mes de marzo del  2018 de literautas.com, el relato (o una parte de él) tenga lugar en una tienda de discos y que aparezcan en el texto las palabras gato, bruja y cine.





También te puede interesar: